martes, 19 de marzo de 2013

Para celebrar la primavera






Para los viajeros, para los buscadores, para los amantes del arte o para los curiosos en general les propongo un par de planes para celebrar el equinoccio de primavera si se encuentran en España.

Como todos los años desde su construcción, para los que saben leer las piedras, se da el caso que en un monasterio burgalés, San Juan de Ortega, podemos ver el llamado “Milagro de la luz”. No es más que el momento de la iluminación por los rayos del sol de un capitel en el que aparece la imagen tallada de la anunciación a la Virgen por parte del arcángel Gabriel. Seguido se puede ver el abrazo de la Virgen con su prima Santa Isabel y el Sueño de San José y la Natividad. Mediante la luz se pretende resaltar el embarazo mediante el Espíritu Santo, es decir, el Misterio de la Concepción. También la luz se puede interpretar como la salvación: la luz mata a las sombras. Dios es luz, dios es salvación.

San Juan de Ortega data de finales del siglo XII (su parte más antigua, perteneciendo al estilo Románico), y es uno de los lugares por los que pasa el Camino de Santiago. Este fenómeno  lumínico dura unos 8 minutos y puede ser contemplado alrededor de las 5 de la tarde. Y para el que se lo pierda en primavera decirles que en el equinoccio de otoño tienen la oportunidad de ver el mismo fenómeno, ya que se vuelve a repetir. 


Otro de los lugares mágicos para pasar esta fecha y ver un fenómeno de estas características es el llamado Dolmen de Soto, en Huelva. Se trata de una construcción megalítica del siglo III a.C. En el equinoccio, los rayos iluminan el pasillo y la sala funeraria, donde se hallaron 8 cuerpos. La luz en este caso simbolizaría el renacimiento a través de la luz de los difuntos, o un camino para los difuntos.

Este fenómeno lumínico no sólo se da en el equinoccio de primavera, sino que podemos encontrar casos en todos los cambios de estación. También en muchas civilizaciones y épocas. Una de las más espectaculares se produce en el equinoccio de otoño en Chichén Itzá, donde la pirámide Kukulcán dibuja a través de luces y sombras una serpiente emplumada, representación del dios.

Un saludo. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario